viernes, 31 de julio de 2009

ETA: MALNACIDOS


No es nuevo decir que las alimañas de ETA son unos malnacidos, pero sí una obivedad. Estos payasos de flequillo recortado, jóvenes, indocumentados, esquizorénicos funcionales y que se mean en los pantalones cuando se les detienen está permanentemente segando vidas y destruyendo ilusiones. Ayer fueron dos chavalitos que empezaban a buscarse su pan en la Guardia Civil; antes de ayer la carastrofe pudo ser secillamente horrenda en Burgos, y mañana ¿quién sabe?, ¿vendrán a por mí? . Cuando hablamos de estos hijos de puta que confunden independencia con pistolas, izquierda con nacismos es difícil adivinar el futuro de un pueblo en PAZ.

lunes, 20 de julio de 2009

EL REGALO


Cuando se investigó el escándalo de Gescartera se descubrió que Luis Ramallo –azote de la corrupción en época socialista, desaparecido después de su paso truculento por la Comisión Nacional del Mercado de Valores- había recibido como regalo varios pares de calzoncillos de seda de la marca Loewe que costaron, entonces, cuarenta mil pesetas cada uno. No se qué sensación puede dar llevar las partes pudendas envueltas en ese dineral; además la seda es incomoda, sobre todo en verano, porque produce una cierta sensación de promiscuidad; la seda, en su caso, es para compartirla.

Pero ahora que El Bigotes ha confesado en grabación telefónica que todos los años le hacía regalos a Rita Barberá, alcaldesa de Valencia, consistentes en bolsos de Luis Vuiton (el más barato vale 900 euros pero se pueden conseguir de imitación por 25 en Marrakech); se explica que las grandes marcas sobrevivirán siendo utilizadas para regalos impactantes en personas que tienen necesidad de que la marca sea visible para sentirse alguien.

Ahora se explica también la defensa cerrada de Barberá porque vio crecer la barba en los trajes de Camps y se acordó de donde guarda las cosas ella para transportarlas.

Se acerca agosto que es un mes peligroso para la memoria. En agosto el cerebro se queda pendiente del vuelo de las gaviotas sobre todos en quienes practican la tecnología del regalo como método de influencias y proximidad para ganar favores. No podemos consentir que el verano perturbe nuestra neuronas porque nos encontramos frente a una trama de mafia organizada que mediante la tecnología del regalo en unas ocasiones y en otras de la “pastuqui” tienen dinero por paraísos fiscales que la Justicia está tratando de descubrir. Toda una era, esta la de los calzoncillos de seda y bolsos de lujo en la que las bodas de los nuevos ricos de la política se hacían en El Escorial tal vez sólo para que pudieran compartir banquete Correa y Berlusconi. De momento, el primer ministro italiano parece blindado para no poder hacer compañía a los amigos de Aznar que ya están en presidio.

c,c.

domingo, 12 de julio de 2009

PARA VOLAR PENSANDO



..Y cuando se hizo grande, su padre le dijo:
-Hijo mío, no todos nacen con alas. Y si bien es cierto que no tienes obligación
de volar, opino que sería penoso que te limitaras a caminar teniendo las alas
que el buen Dios te ha dado.
-Pero yo no sé volar – contestó el hijo.
-Ven – dijo el padre.
Lo tomó de la mano y caminando lo llevó al borde del abismo en la montaña.
-Ves hijo, este es el vacío. Cuando quieras podrás volar. Sólo debes pararte
aquí, respirar profundo, y saltar al abismo. Una vez en el aire extenderás las
alas y volarás...
El hijo dudó.
-¿Y si me caigo?
-Aunque te caigas no morirás, sólo algunos machucones que harán más fuerte
para el siguiente intento –contestó el padre.
El hijo volvió al pueblo, a sus amigos, a sus pares, a sus compañeros con los
que había caminado toda su vida.
Los más pequeños de mente dijeron:
-¿Estás loco?
-¿Para qué?
-Tu padre está delirando...
-¿Qué vas a buscar volando?
-¿Por qué no te dejas de pavadas?
-Y además, ¿quién necesita?
Los más lúcidos también sentían miedo:
-¿Será cierto?
-¿No será peligroso?
-¿Por qué no empiezas despacio?
-En todo casa, prueba tirarte desde una escalera.
-...O desde la copa de un árbol, pero... ¿desde la cima?
El joven escuchó el consejo de quienes lo querían.
Subió a la copa de un árbol y con coraje saltó...
Desplegó sus alas.
Las agitó en el aire con todas sus fuerzas... pero igual... se precipitó a tierra...
Con un gran chichón en la frente se cruzó con su padre:
-¡Me mentiste! No puedo volar. Probé, y ¡mira el golpe que me di!. No soy
como tú. Misalas son de adorno... – lloriqueó.
-Hijo mío – dijo el padre – Para volar hay que crear el espacio de aire libre
necesario para que las alas se desplieguen.
Es como tirarse en un paracaídas... necesitas cierta altura antes de saltar.
Para aprender a volar siempre hay que empezar corriendo un riesgo.
Si uno quiere

viernes, 3 de julio de 2009

LOS "VALORES" DEL PP Y LA HIPOCRESIA


Siempre digo que el idioma es como un espejo que refleja la vida misma; contiene las mismas grandezas y las mismas miserias que se encuentran en el mundo y en el ser humano. Porque el lenguaje es la verbalización del pensamiento, y, como el pensamiento, puede ser límpido y puro, o puede ser manipulador y mezquino. Existen mensajes que formalmente tienen apariencia de argumentaciones coherentes, pero que en realidad esconden razonamientos falsos. Son las denominadas falacias lingüísticas; una de ellas es la “falsa generalización”, que consiste en generalizar un hecho o una idea que no es realmente general.
Un ejemplo muy claro de esta artimaña lingüística y conceptual se aprecia cuando los del PP aluden, de manera redundante y machacona, a “los valores”, como si los que no votamos a Rajoy estuviéramos inmersos en la más funesta inmoralidad. Se trata de una falsa generalización porque consideran universales unos principios que, afortunadamente, no lo son. Hablan de “los” valores, cuando deberían hacerlo de “sus” valores. Consideran, y pretenden hacer creer a todos, que esos “sus valores” son los únicos que deben regir el “modus vivendi” de toda la sociedad. Y esos valores son, en esencia, los postulados añejos y católicos que se sustentan en una visión de la vida rígida, intolerante, dogmática, hipócrita, clasista y anuladora de las libertades personales y sociales. Su famosa y arcaica defensa de la llamada “familia tradicional”, quizás tenga por interés constreñir la libertad afectiva de los ciudadanos; quizás pretenda encadenar los afectos a un único modelo de vida ajustado a los intereses de los que extraen su poder del sometimiento y la explotación de los demás. Lo que llaman “defensa de la vida” quizás sea sólo otro modo de denominar (mediante otra falacia lingüística e ideológica) la anulación de las libertades ajenas; porque si de verdad fuera defensa de la vida, ni apoyarían guerras genocidas, ni apoyarían campañas contra métodos de anticoncepción que llevan a la muerte a millones de seres, ni permitirían la explotación de niños, ni la criminalización de inmigrantes, ni la desprotección de los desamparados.... Si los “valores” de los que habla Rajoy fueran realmente valores humanos universales, no apoyaría, en aparente y descarada complicidad, a Camps, Costa o Fabra, implicados en casos graves de corrupción. Si esos mismos “valores” de los que Aznar ha hecho gala en tantas manifestaciones, fueran realmente valores, no sentiría, como reconoce, admiración por Berlusconi, un presunto capo que llegó a la política para librarse de la justicia como empresario corrupto, y presuntamente implicado en aberrantes casos de abusos de poder y de corrupción de menores. Quizás sea que esos “valores”, no sean tales; y quizás sea que los que tanto hablan de valores, carezcan realmente de ellos. Porque, a día de hoy, los verdaderos valores que son universales y que respaldan una concepción ética y fraternal de los individuos y de los pueblos son los que, heredados de la Ilustración, están contenidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos. El resto, quizás sea solo falacias, e hipocresía que enmascare el deseo de continuidad de viejos idearios castradores, totalitarios y liberticidas. Quizás les convendría, a los del PP, dar un somero repaso a los artículos contenidos en la mencionada Carta Magna, y hacer un buen “examen de conciencia”, porque esos “valores” que tanto defienden nada tienen que ver con la ética humanista y universal que contempla el derecho al librepensamiento, la tolerancia, la razón, la fraternidad entre todos los seres humanos, el respeto a la pluralidad y el ejercicio responsable de la libertad individual. Es decir, esos valores que sí nos pertenecen a todos, y que son el eje que vertebra cualquier sociedad que pretenda vivir en paz y de manera realmente democrática. Coral Bravo es Doctora en Filología y miembro de Europa Laica -->
Un ejemplo muy claro de esta artimaña lingüística y conceptual se aprecia cuando los del PP aluden, de manera redundante y machacona, a “los valores”, como si los que no votamos a Rajoy estuviéramos inmersos en la más funesta inmoralidad. Se trata de una falsa generalización porque consideran universales unos principios que, afortunadamente, no lo son. Hablan de “los” valores, cuando deberían hacerlo de “sus” valores. Consideran, y pretenden hacer creer a todos, que esos “sus valores” son los únicos que deben regir el “modus vivendi” de toda la sociedad. Y esos valores son, en esencia, los postulados añejos y católicos que se sustentan en una visión de la vida rígida, intolerante, dogmática, hipócrita, clasista y anuladora de las libertades personales y sociales. Su famosa y arcaica defensa de la llamada “familia tradicional”, quizás tenga por interés constreñir la libertad afectiva de los ciudadanos; quizás pretenda encadenar los afectos a un único modelo de vida ajustado a los intereses de los que extraen su poder del sometimiento y la explotación de los demás. Lo que llaman “defensa de la vida” quizás sea sólo otro modo de denominar (mediante otra falacia lingüística e ideológica) la anulación de las libertades ajenas; porque si de verdad fuera defensa de la vida, ni apoyarían guerras genocidas, ni apoyarían campañas contra métodos de anticoncepción que llevan a la muerte a millones de seres, ni permitirían la explotación de niños, ni la criminalización de inmigrantes, ni la desprotección de los desamparados.... Si los “valores” de los que habla Rajoy fueran realmente valores humanos universales, no apoyaría, en aparente y descarada complicidad, a Camps, Costa o Fabra, implicados en casos graves de corrupción. Si esos mismos “valores” de los que Aznar ha hecho gala en tantas manifestaciones, fueran realmente valores, no sentiría, como reconoce, admiración por Berlusconi, un presunto capo que llegó a la política para librarse de la justicia como empresario corrupto, y presuntamente implicado en aberrantes casos de abusos de poder y de corrupción de menores. Quizás sea que esos “valores”, no sean tales; y quizás sea que los que tanto hablan de valores, carezcan realmente de ellos. Porque, a día de hoy, los verdaderos valores que son universales y que respaldan una concepción ética y fraternal de los individuos y de los pueblos son los que, heredados de la Ilustración, están contenidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos. El resto, quizás sea solo falacias, e hipocresía que enmascare el deseo de continuidad de viejos idearios castradores, totalitarios y liberticidas. Quizás les convendría, a los del PP, dar un somero repaso a los artículos contenidos en la mencionada Carta Magna, y hacer un buen “examen de conciencia”, porque esos “valores” que tanto defienden nada tienen que ver con la ética humanista y universal que contempla el derecho al librepensamiento, la tolerancia, la razón, la fraternidad entre todos los seres humanos, el respeto a la pluralidad y el ejercicio responsable de la libertad individual. Es decir, esos valores que sí nos pertenecen a todos, y que son el eje que vertebra cualquier sociedad que pretenda vivir en paz y de manera realmente democrática.
c.b