viernes, 14 de septiembre de 2007

LOS DELIRIOS DE RAJOY


“La situación está peor que nunca”, asevera el líder del PP sobre los nacionalismos culpando al presidente


El presidente Zapatero, en la barcelonesa localidad de Gavà –con motivo de la Fiesta de la Rosa que organiza cada año el PSC-, comentó ayer con ironía: “Que en EEUU hay problemas con las hipotecas, la culpa es de Zapatero. Que dimite José Jon Imaz, la culpa es de Zapatero. Que hay unos energúmenos que queman imágenes del Rey, la culpa es de Zapatero y menos mal que ganamos a Grecia, que si no la culpa, de Zapatero”.

No exagera el jefe del Gobierno. Mariano Rajoy, entrevistado en el diario La Razón, ha insistido en adjudicar a Zapatero todo tipo de responsabilidades y ha retornado a sus delirios. Respecto a la cuestión territorial y los nacionalismos el diagnóstico del líder del PP no puede ser más demagógico o soez: “La situación está peor que nunca. Ahí está la crisis del PNV, ahí están las declaraciones de destacados dirigentes en Cataluña pugnando por ser más soberanistas, la afrenta a los Reyes (…)”.


El famoso plan Ibarretxe

Lo peor o más repulsivo de la actitud de Rajoy es su deliberada falta de memoria. Gobernando José María Aznar y siendo Rajoy ministro, el PNV se fue al monte acompañado de etarras y batasunos a propósito del hipernacionalista Pacto de Lizarra, mientras Ibarretexe empezaba a darle vueltas a su famoso plan con vistas a la independencia. Añádase el detalle ni futil ni menor de que todo ello ocurría en España poco después del maravilloso romance que protagonizaron públicamente Xavier Arzalluz y el mismísimo Aznar.


El sí del PNV a Aznar

No debe olvidarse que el PNV votó sí a la investidura de Aznar y fue un aliado muy preferente del Gobierno hasta casi las postrimerías de la primera legislatura de los conservadores ¿Considera Rajoy culpable a Aznar, quien se había enamorado de los nacionalistas vascos -como de los catalanes de CiU- de aquel giro hacia el soberanismo desenfrenado?


Hipócrita lección

El candidato a presidente por el PP alardea de que, respecto al proceso de paz, “los hechos han demostrado que no estábamos equivocados”. E imparte una vez más su hipócrita lección, por otra parte tan conocida: “La única posibilidad que tiene una banda terrorista de conseguir sus objetivos es que alguien esté dispuesto a negociar con ella a cambio de que deje las armas, por eso la única política antiterrorista seria es la que descarta la negociación porque deja a los terroristas sin esperanza de lograr sus objetivos.” ¿Considera acaso Rajoy que el Gobierno al que pertenecía no fue partidario de la “única política antiterrorista seria” que es la “que descarta la negociación”, cuando hizo suya, con singular entusiasmo, la tregua de ETA de 1998-99?


Credibilidad y fiabilidad, agotadas

“Es verdad que, al igual que muchos otros españoles, no me fío de las verdaderas intenciones del señor Rodríguez Zapatero respecto a ETA y en relación a la estructura del Estado (…) La credibilidad y la fiabilidad del señor Rodríguez Zapatero se han agotado”, remacha Rajoy, proyectando de nuevo la sombra de la sospecha sobre el actual presidente. Lo difama sembrando dudas sobre sus “verdaderas intenciones”.


Lenguaje melifluo

Con palabras que pretenden ser más contenidas y en un lenguaje formalmente más melifluo que el de sus centuriones, como Ángel Acebes o Eduardo Zaplana, Rajoy abona la insidia o la calumnia. O, simplemente, legitima que desde la derecha mediática se siga presentando a Zapatero como una especie de cómplice de los terroristas.


El reloj, parado

En total coincidencia con la mayoría de los jerarcas de la Iglesia católica, Rajoy arremete sin paliativos contra Educación para la Ciudadanía. “Creo que el Gobierno debería parar el reloj de la implantación de esa asignatura”, proclama. Y lo hace poniéndose el disfraz de defensor de las libertades: “Con su política, el Gobierno está molestando a muchos españoles, a los que yo quiero trasladar todo mi apoyo porque tienen derecho a elegir libremente, como así lo reconoce la Constitución, la educación que quieren para sus hijos.”


Hace más de treinta años

¿Considera, de verdad, Rajoy que esos españoles contrarios a Educación para la Ciudadanía no pueden elegir libremente la educación de sus hijos? ¿No sabe el candidato a presidente que afortunadamente en este país hay, desde hace más de treinta años, un sistema democrático que permite a los ciudadanos elegir a sus gobernantes?


Capacidad constitucional

El 14-M votaron los españoles en libertad. Gracias a los votos de socialistas y del resto de partidos, salvo el PP, gobierna Zapatero. Y es el Gobierno el que tiene toda la capacidad constitucional para fijar los planes de estudio en las escuelas. En España, señor Rajoy, mandan los votos. No las sotanas.

E.S.

5 comentarios:

Maripuchi dijo...

Todos (menos ellos, claro está) son malos malísimos. La encarnación rediviva del mismísimo Belcebú.
¿Qué quieres?
Éso sí, ya pueden tener mayoría absoluta la próxima vez que ganen unas elecciones porque pienso hacer una oposición igual de rastrera... hay cosas que no se pueden perdonar.

M.Angel dijo...

Que se vuelva a su cueva, menudo partido de neanderthales.

Anónimo dijo...

No les soporto¡ no les soporto¡ no les soporto¡

Blanca dijo...

Es bastante irritante escucharles, a cualquiera de ellos, desde el registrador hasta la última becaria, machaca o enchufado.

La manera que tienen de hacer política es lo que retrae a las personas normales de las urnas, esa machaconería de consignas... ahora resulta patético escuchar a Acebes hablas de que los pobres españoles no llegan a fin de mes porque la "micro" economía va mal... cuando esa frase la aprendió hace poco... ¿será su microeconomía la que va mal? ¿o la del registrador? ¿o la microeconomía de Aznar, quizás?

No tienen vergüenza, han perdido los papeles de la dignidad hace tiempo y son incapaces de encontrarlos.

Antonio Parra dijo...

Ami@s, al PP se le paró el reloj hace mucho tiempo. Desde que se les paró, las agujas giran en sentido inverso a la democracia y a la sociedad madura. Vuelven a las cavernas, al nacional-catolicismo, al fascismo puro y duro.
Me preocupa esa parte importante de sociedad inmadura consecuencia de la manipulación goebbelsiana que aún se deja engañar por la machacona mentira que los dirigentes ¿populares? largan por sus nauseabundas bocas cada vez que la abren.
NO PASARAN!!!!!!!!