sábado, 30 de junio de 2007

SINVERGÜENZAS



Ahora hay que volver a publicar las fotos y emitir los vídeos de aquel día. Hay que reproducir las canalladas expresadas por los comentaristas rabiosos que justificaban la agresión a Bono porque “era una provocación su presencia” y machacaron la trayectoria profesional de unos policías que han tenido que abandonar su carrera y verse tratados como los peores delincuentes. Tenemos que pedir responsabilidades políticas a quienes utilizaron la sentencia de la Audiencia Nacional en sede parlamentaria y exigieron la inmediata dimisión del ministro Alonso, al que el señor Martínez Pujalte –precisamente él - le gritaba “fascista” hasta forzar su expulsión de la sala de plenos. El gobierno, y el grupo parlamentario socialista, no deben limitarse a considerar como una victoria moral la sentencia del Tribunal Supremo que absuelve de toda culpa a los policías acusados de detención ilegal. Aquí se han escuchado, en la línea del tremendismo que caracteriza a una oposición que utiliza a las víctimas del terrorismo, tanto en España como en el Líbano, palabras impropias de cualquier país occidental y democrático. No es ejemplar para el conjunto de la sociedad que esos comportamientos queden impunes y que los agredidos tengan que sentirse simplemente agradecidos porque hayan podido demostrar su inocencia. No puede resultar gratis practicar el insulto como método y sembrar en el pueblo español la idea de que se vive en una dictadura socialista. Ahora sí, doña Rosa Díez, va a demostrar en variadas tribunas su solidaridad con sus compañeros de partido, aunque moleste a sus anfitriones en prensa, radio y televisión. Basta ya, dirá con la contundencia que la caracteriza.
Pedir perdón debe llevar aparejada la imposición de alguna penitencia, pero lo más urgente a la vista del tono de confrontación política que ha impuesto el PP por el mandato de sus talibanes mediáticos, es el propósito de la enmienda. Doña Esperanza Aguirre pedirá al ministro del Interior que restituya en su puesto, con todos los honores, al Delegado del Gobierno don Constantino Méndez. Don Mariano Rajoy, estoy seguro, subirá a la tribuna el día tres y antes de comenzar su alegato en el debate del estado de la Nación, pedirá que se supriman de las actas del Congreso sus palabras y anunciará su intención de no utilizar nunca más la expresión “vergüenza” para referirse a comportamientos ajenos. Qué menos puede esperarse de tan egregios representantes del pensamiento liberal.
सोतिल्लोस (एल प्लुरल)

7 comentarios:

Rafa dijo...

No espero la más minima rectificación por parte de estos estafadores morales, de echo no hay más que ver la reacción de sus medios de cabecera como "El inMundo", que en su habitual estilo, en las antipodas de la verdad, todavía hoy retuerce los argumentos hasta parecer que son los propios jueces del TS los que deberian ir a prisión.
Un inmenso apaluso para el ex-delegado Constantino Mendez, que tuvo que soportar los ataques de la jauria, con una gran dignidad.

Paco dijo...

Estoy de acuerdo con Rafa. No erspero que este hatajo de sinvergüenzas vayan a hacer ni un solo comentario acerca de la sentencia, y mucho menos alguna autocrítica. Esta gente no se ve más que el ombligo. Al menos ha triunfado la justicia, que no es poco consuelo.

Blanca dijo...

Es tan vomitiva esta forma de hacer política que nunca más en España vamos a tener inocencia. Algo muy grande se ha roto en estos tres años y no tiene recomposición, Antonio, es muy lamentable, pero es así.

El próximo debate del estado de la nación va a ser tan nefasto como los anteriores, oiremos las mismas aberraiones, tendremos que soportar la cara de cínico de Zaplana, la cara de beata de Acebes, las cara sinsubstancia de Rajoy y la bronca general a que nos tienen acostumbrados. La decencia no es virtud en esta derecha cerril que nos atormenta cada día.

A mi hace tiempo que se me terminó la paciencia y no tengo la más mínima esperanza de que alguna vez tengan algo positivo y enriquecedor que decir. Ni saben, ni quieren, ni pueden.

Anónimo dijo...

Pero si es el Supremo es el que ha cometido la ilegalidad¡ eso dice Esperanza Aguirre en Madrid, tan ilegales que les van a denunciar en Estraburgo y todo.

Espero que los policías denuncien estos hechos de una vez por todas. También me gustaría que lo hiciera Bono, pero ya sabemos como es Bono...

Antonio Parra dijo...

Rafa, Paco, Blanca, Rue, despues de unos días perdido en las playas de Cadiz, Debate del estado de la Nación incluido, he llegado a una conclusión: Rajoy ha firmado su sentencia de muerte (ya le podemos dar el ACTA de DEFUNCIÓN. Es un cadaver político.
El circo le salió ardiendo al amo (Aznar) mando al Payaso (rajoy) a pedir socorro al pueblo para apagar el fuego, y los ciudadanos pensaron que era una treta para reclutar clientes y se descojonaron y el circo ardió, espero que con el hayan muerto las alimañas y los trapecistas de la mentira y la manipulación de una puta vez. (gracias por la parábola del Payaso Dardo).
Estoy un poco agotado y casi no me apetece escribir, espero que a vosotros no se os acaben las ganas.
Saludos a todos.

Dardo dijo...

Antonio eres único (ja,ja). Pero ten cuidado con el manejo de esta parábola; porque te habrás fijado que en ella el "payaso" tenía razón. Tod@s se reían de él, lo consideraban estrafalario o en el mejor de los casos un buen actor; pero estaba anunciando que el Circo (Genóva, 13 según tú) se estaba quemando. Pero ya te he dicho que el incendio arrasa la misma aldea y el bosque y cosechas de los aldeanos. O sea; que en su patetismo tenia razón el clow.

Pero Antonio lo que sí está claro es que eres un pirómano; claro, eso es lo que tiene estar entre tanto fogón; terminas adorandolo. Ya sé cuales son los dioses protectores de tu quehacer: Vesta y Vulcano. Pues aunque éste es verdaderamente el dios del fuego; aquélla era la diosa protectora de la familia y la encargada de que no se "acabara el gas" (que estuviera siempre encendido el fogón). Aunque me parece que Vesta es demasiado conservadora para ti.

Saludos

Antonio Parra dijo...

jjajajajaja, Dardo, eres la leshe. La aldea no se quemará, ni el bosque que lo rodea. Si acaso prenderá un poco el fuego por el Barrio de Salamanca, seguro que no llegará a Vallecas.
Saludos Dardo